Una de las placas más comunes que se utilizan para hacer impresiones son las placas de grabado en zinc y cobre. ¿Por qué son especiales y diferentes a otros materiales? El zinc es un metal suave y ligero que se puede tallar fácilmente. Permite a los artistas rascar sus diseños en las placas de zinc muy rápidamente, sin necesidad de mucha fuerza. Por eso, el zinc es tan popular entre aquellos que desean crear piezas finas y delicadas.
Por el contrario, el cobre es un metal robusto y resistente. Este papel fuerte permitirá a los artistas hacer impresiones de muy alta calidad. Aunque las placas de cobre tardan más en prepararse que las de zinc para imprimir. Muchos artistas prefieren el cobre, incluso si es un poco más complejo de manejar, ya que crea impresiones tan hermosas que son realmente asombrosas.
La grabación es una forma de arte, por lo que los artistas comienzan con una placa metálica plana. Utilizarán varias herramientas para rayar o dibujar su diseño en la superficie de la placa. Una vez que completan su diseño, la placa se sumerge en un baño de ácido. El ácido penetra y se come la superficie, dejando atrás las líneas y surcos del diseño que ha sido grabado.
Las placas de zinc y cobre se utilizan realmente a menudo en este proceso por los artistas. Primero pueden haber grabado su diseño en una placa de zinc, y luego transferido ese diseño a una placa de cobre, de la cual imprimir. Esta técnica se llama el método de grabado de doble placa. Es impresionante porque permite a los artistas producir trabajos de línea muy fina y detalles altos en varios colores al hacer impresiones.
La combinación de placa de cobre produce algunas de las mejores impresiones. Las placas de zinc funcionan genial para grabar detalles sutiles y líneas delicadas, mientras que las placas de cobre ofrecen un tono rico y profundo que añade dimensión a las propias impresiones. Para crear impresiones con detalles finos y colores atrevidos, los artistas mezclan estos dos metales.
Además, las placas de zinc y cobre permiten a los artistas explorar diversos estilos y técnicas. Por ejemplo, se puede usar una barniz suave en la placa de zinc para lograr una textura suave o un barniz duro para líneas nítidas y texturas únicas. Esta libertad creativa infinita crea innumerables caminos que los artistas pueden tomar, dándole aún más potencial a su obra.
Como artista interesado en intentar usar placas de zinc y cobre, puede ser útil considerar los siguientes consejos. Primero, manipular las placas de manera temeraria es demasiado sensible. Asegúrate de limpiar y secar bien las placas de zinc antes de usarlas. El pulido y desgrasado se realiza en las placas de cobre asegurándose de que la superficie obtenida esté completamente limpia para poder continuar con tu proceso de aguafuerte.